Agentes de la Guardia Civil de la Comandancia de Sevilla han detenido a dos personas, identificadas como J.A.A.S., de 22 años, y J.A.G.A. de 23 años, como supuestos autores de 19 delitos violentos, pues están acusados de perpetrar distintos atracos en los que hacían uso de armas blancas.
Según informó el Instituto Armado en una nota de prensa, a primeros de noviembre se produjo un robo con violencia e intimidación en el interior de un establecimiento hostelero en Bollullos de la Mitación, durante el cual los atracadores, provistos de pasamontañas y portando un cuchillo de grandes dimensiones, se apropiaron de 600 euros.
La Guardia Civil realizó la inspección ocular del establecimiento e interrogó a los testigos, orientando las pesquisas cuando tuvieron conocimiento de otro robo similar ocurrido en Pilas, donde asaltaron a un repartidor de pizzas. Ese mismo día, la Guardia Civil recuperó el vehículo usado en el atraco, que había sido robado.
Los guardias civiles que investigan el caso conocieron de otros robos con el mismo 'modus operandi', pues los atracadores llegaban al lugar que previamente habían controlado, bien una gasolinera, un comercio o un supermercado, llevando la cara tapada con pasamontañas y esgrimiendo armas blancas, ya fueran cuchillos o incluso katanas. Así, atemorizaban a la víctima, pero si ésta ofrecía algún tipo de resistencia llegaban a hacer uso de la violencia.
Los hechos se cometieron en las localidades sevillanas de Bollullos, Los Palacios, Pilas, Utrera, Puebla del Río, Las Cabezas de San Juan, Isla Mayor, Gelves, el Viso del Alcor, Alcalá de Guadaíra y Dos Hermanas. En uno de los hechos, ocurrido en Gelves, mientras uno inmovilizaba a la cajera de un supermercado y le colocaba presuntamente un cuchillo en el cuello, el otro se apropiaba del dinero. En otro, perpetrado en la localidad de las Cabezas, llegaron a seccionarle los tendones de cuatro dedos a una víctima que ofreció resistencia.
PASAMONTAÑAS Y KATANAS
La Benemérita, gracias a las distintas indagaciones, identificó a los supuestos autores, dos conocidos delincuentes con numerosos antecedentes policiales. También se descubrió que eran los mismos que, días antes, huyendo de una patrulla de la Policía Local de Puebla del Río, empotraron un vehículo robado contra el vehículo oficial huyendo a pie.
Por otro lado, guardias civiles de distintas unidades se integraron en un despliegue para localizar un vehículo que había sido robado, presumiblemente por los sospechosos y que había sido empleado en los últimos atracos. El vehículo fue finalmente encontrado en la localidad de Palomares del Río, donde los agentes centraron sus indagaciones para intentar situar a los sospechosos. Una vez que los investigadores situaron los inmuebles donde se encontraban los supuestos delincuentes, solicitaron dos entradas y registros que fueron concedidas por la autoridad judicial.
Iniciada la entrada y registro y una vez en el interior del domicilio, no aparecieron ninguno de los autores, así que los guardias civiles sospecharon que se podían haber escapado por una ventana abierta y encontrarse en los tejados o en las viviendas colindantes. Iniciando una búsqueda por la zona, hallaron escondidos en una azotea a los dos sospechosos, que fueron detenidos. En las viviendas se encontraron algunos objetos robados y otros usados en los atracos, como pasamontañas, vestimenta, katanas, cuchillos y la llave de uno de los vehículos.
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